Pertenece, como el Taleggio, a la tradición casera. Se presenta como una pasta muy blanca, compacta y friable. Es un queso madurado que conserva todas las características externas del producto fresco. El sabor es bastante fuerte pero dulce al paladar, un poco amargo y muy intenso. La corteza, después de la cura, es muy sutil y de color rosa.
Kg. 1,8
Maduración 30 días